¿Has considerado alguna vez la posibilidad de que nuestra realidad sea un holograma? ¿Y si existieran verdades fundamentales sobre nuestra realidad que son tan poderosas, que la CIA y otras organizaciones gubernamentales las han estudiado para comprender cómo funciona realmente nuestra realidad?
En este post, exploraremos la idea de que vivimos en un mundo holográfico y cómo entender esto puede cambiar nuestras vidas desde adentro.
¿Qué son las formas de pensamiento y cómo afectan nuestra realidad?
Según el libro “Formas de Pensamiento”, las formas de pensamiento son estructuras energéticas que se forman a partir de los pensamientos y emociones que tenemos. Aunque no las podamos ver físicamente, estas formas de pensamiento tienen un impacto en nuestra realidad.
- Por ejemplo, cuando tenemos pensamientos negativos hacia alguien más, emitimos energía negativa hacia ellos, lo cual afecta no solo a ellos, sino también a nuestra propia energía.
- Del mismo modo, cuando enviemos pensamientos positivos hacia los demás, creamos una energía positiva que puede beneficiar no solo a la otra persona, sino también a nosotros mismos.
¿Cómo afectan las formas de pensamiento nuestra interacción con los demás?
Nuestro campo energético interactúa con los de los demás constantemente. Cuando estamos cerca de personas con pensamientos negativos o energías más densas, es posible que sintamos una disminución en nuestra energía. Por otro lado, cuando estamos cerca de personas con pensamientos y emociones positivas, es más probable que nos sintamos más elevados y resonantes.
- También es importante señalar que nuestras formas de pensamiento acumuladas pueden generar ciertos patrones en nuestra vida. Si tenemos pensamientos negativos recurrentes, es más probable que atraigamos situaciones o personas que reflejen esa energía. Por lo tanto, al tomar conciencia de nuestros propios pensamientos y emociones, y al enfocarnos en generar energía positiva, podemos influir en nuestras interacciones y experiencias.
¿Cómo protegernos de las energías negativas y mantener una energía positiva?
En lugar de buscar protección externa, como escudos energéticos, la clave está en elevar nuestra propia frecuencia y mantener un campo energético positivo. Al elevar nuestra vibración y enfocarnos en pensamientos y emociones positivas, creamos una barrera natural contra las energías negativas.
- No necesitamos temer o preocuparnos por las energías negativas, sino más bien centrarnos en cultivar una energía positiva en nosotros mismos.
Conclusiones:
Nuestro mundo puede ser mucho más complejo y fascinante de lo que imaginamos. Al expandir nuestra percepción de la realidad y comprender el poder de nuestras formas de pensamiento, podemos activar una transformación interna que nos permita experimentar una vida más plena y significativa.
- Recuerda que tú tienes el poder de influir en tu realidad a través de tus pensamientos y emociones. Elige cultivar una energía positiva, envía pensamientos amorosos hacia los demás y presencia cómo esto se refleja en tu propia experiencia de vida. ¡Descubre el potencial transformador de tu propia consciencia y abraza una nueva forma de vivir!